San Francisco, CA — Una nueva propuesta del gobernador Gavin Newsom ha generado preocupación e indignación entre la comunidad latina e inmigrante del Área de la Bahía. El plan, que busca cobrar $100 mensuales a adultos indocumentados inscritos en Medi-Cal a partir de 2027, ha sido recibido por muchos como un golpe inesperado a los avances logrados en materia de acceso a la salud.
Organizaciones comunitarias como Hijas del Campo, con base en Brentwood, han levantado la voz en defensa de las familias campesinas e inmigrantes que dependen de este seguro médico estatal. “Como que estamos yendo para atrás”, lamentó Merivel Mendoza, vocera de la organización. “Luchamos muchísimo para que nuestros campesinos y familias indocumentadas tengan esta ayuda. En una manera, el gobernador está volteando su espalda a nuestra comunidad”.
La noticia ha resonado especialmente entre trabajadores de bajos ingresos que ya enfrentan altos costos de vida. “Nos cae como un balde de agua fría”, dijo una residente que prefirió no ser identificada. “Para alguien que vive al día, $100 es una carga muy pesada. Ya de por sí nos estamos privando de comprar alimentos”.
La expansión de Medi-Cal para personas indocumentadas mayores de 26 años fue un logro histórico celebrado por miles de familias latinas en California. Mendoza explicó que su organización ayudó a inscribir a decenas de trabajadores agrícolas, muchos de los cuales nunca antes habían tenido acceso a servicios médicos básicos.
Para la comunidad inmigrante, esta propuesta representa más que un ajuste presupuestario: es una señal preocupante de retroceso en la equidad. Mientras continúan los debates en Sacramento, líderes latinos piden que no se olvide el valor y el sacrificio de quienes mantienen a flote gran parte de la economía estatal sin esperar mucho a cambio.