MADRID — Este sábado, el Estadio Santiago Bernabéu se convirtió en escenario de una emotiva despedida que marcó el final de una era dorada para el Real Madrid. El técnico italiano Carlo Ancelotti y el legendario mediocampista croata Luka Modric dijeron adiós al club blanco tras años de éxitos que los convirtieron en íconos para la afición, incluyendo a muchos latinos que siguen al equipo desde Estados Unidos.
Con una ovación ensordecedora, los miles de hinchas presentes en el estadio se pusieron de pie para despedir a Modric, quien entre lágrimas agradeció el cariño del club que fue su casa durante 13 temporadas. “El momento que no quería que llegara ha llegado”, expresó el croata, visiblemente emocionado. Sus 28 títulos con el Madrid, incluyendo seis Copas de Europa, lo colocan entre los más grandes de la historia del fútbol moderno.
Por su parte, Ancelotti, quien ahora se prepara para asumir la dirección de la selección de Brasil, también fue homenajeado con aplausos y pancartas que reconocían su legado como uno de los entrenadores más exitosos del club. “Ha sido un placer entrenar a este club… ha sido inolvidable”, declaró el técnico de 65 años, quien conquistó 15 títulos en sus dos etapas con el Real Madrid.
Los aficionados, muchos con raíces latinas y residentes en EE.UU., siguieron con nostalgia el momento a través de transmisiones y redes sociales. Para muchos, Modric y Ancelotti representan más que fútbol: simbolizan trabajo, humildad y entrega. No es raro ver camisetas del Real Madrid con el número 10 de Modric en comunidades latinas de California, Texas o Nueva York, donde su figura ha inspirado a nuevas generaciones de futbolistas jóvenes.
Aunque ambos aún tienen compromisos pendientes con el club —incluido el Mundial de Clubes el próximo mes—, la ceremonia en el Bernabéu fue el gran cierre simbólico. Con abrazos, lágrimas y el respeto de toda una hinchada global, se cierra uno de los capítulos más brillantes en la historia del Real Madrid. Para los fanáticos latinos en EE.UU., quedará el recuerdo imborrable de una dupla que dejó huella tanto dentro como fuera del campo.