Una jueza federal en Estados Unidos detuvo temporalmente la deportación de unos 600 menores guatemaltecos que serían enviados a su país de origen.
La magistrada Sparkle L. Sooknanan dictaminó este domingo, tras una audiencia de emergencia, que los niños no acompañados no podrán ser deportados en los próximos 14 días. La orden se produjo luego de que algunos menores ya habían sido trasladados a aviones listos para despegar durante la madrugada, según informaron abogados de los niños a la agencia Associated Press.
Sooknanan ordenó que los menores fueran retirados de las aeronaves y regresados a las instalaciones de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados mientras continúa la disputa legal.
“No quiero que haya ninguna ambigüedad”, escribió la jueza, aclarando que la medida aplica a todos los niños guatemaltecos que ingresaron a Estados Unidos sin la compañía de sus padres o tutores.
Con esta decisión, el plan del gobierno del expresidente Donald Trump para ejecutar las deportaciones masivas queda, por ahora, suspendido en espera de nuevas audiencias judiciales.
